¿Te habías preguntado alguna vez cómo descafeinar el café? Probablemente sí, pero lo que no contabas era que una de las opciones consistía en utilizar dióxido de carbono (CO2). Si bien uno de los métodos más utilizados para descafeinar café, la adopción de otros métodos ha hecho que esta realidad cambie un poco.
Nuevos consumidores exigen las diferentes técnicas con diversos resultados en cuanto al sabor y la calidad del café, apreciables a simple vista y con aromas y sabores únicos. Hoy, te contaremos un poco sobre cómo descafeinar el café pero desde el CO2.
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Descafeinar con CO2
Una de las tecnologías más modernas hasta ahora sobre cómo descafeinar el café gira entorno del CO2. El descafeinado del té y del café con CO2 de alta presión, es un proceso cíclico, mediante el que la cafeína es eliminada selectivamente del producto.
En el proceso, se rocían los granos de café con dióxido de carbono a una alta presión. En ese sentido, se lleva al CO2 a un estado supercrítico, es decir, a un estado intermedio entre líquido y gaseoso. La adecuada selección de condiciones de procedimiento –presión y temperatura- consigue una calidad del té o café descafeinado suave y seguro.
Las pérdidas de materia prima son muy leves e insignificantes. Por tanto, nos da un mejor sabor, aroma y el color de la infusión es completo. El dióxido de carbono es un componente natural del aire y físicamente inofensivo. A la vez que quita la cafeína, protege de la oxidación y previene olores y gustos indeseables.
El C02 es el que se une a las moléculas de cafeína, sacándolas del grano sin tostar. El gas se retira y la presión disminuye, dejando a la cafeína en una cámara separada. Por ello, se obtiene como resultado final un excelente café descafeinado con un proceso totalmente ecológico que solo utiliza elementos presentes en la naturaleza.
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¿Descafeinar café es bueno para la salud?
A simple vista, mojar los graos de café en disolventes no luce como algo muy saludable, pero ambos agentes tienen el visto bueno por las agencias de salud. De acuerdo con un reportaje de la BBC mundo, en 1985 la Administración de Alimentos y Fármacos de EE. UU. determinó que la probabilidad de que exista un riesgo para la salud, como por ejemplo al cloruro de metileno era «tan baja que prácticamente no existía«.
El método con cloruro de metileno es otra de las formas de descafeinar el café, así como los que emplean agua, en la que la solución rica en cafeína (llena de sabores) se filtra a través de carbón activado que captura la cafeína.
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